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QUIENES SON LOS SIERVOS DEL CORDERO? "Son los que vienen de la gran tribulación, han lavado sus vestiduras y las han blanqueado con la sangre del Cordero. Por eso están delante del Trono de Dios, dándole culto día y noche en su Santuario. "(Apoc. 7, 14-15) Los Siervos del Cordero son un ejército espiritual de intercesores misioneros católicos carismáticos, que se han unido para aprender a vivir el amor misericordioso de Dios, compartirlo y llevarlo a otros a través de un trabajo de intercesión que han descubierto como una segunda vocación en sus vidas. Un día en oración, el Espíritu Santo inspiró que la misión de los Siervos del Cordero es ser “los rescatadores de la presencia real y verdadera de la gloria de Dios.” Convencidos de que: "hemos sido creados para ser alabánza de la gloria de Dios " (Ef 1, 12), se esfuerzan día a día en aprender a alabárlo y adorárlo. Es a través de esta experiencia como han ido descubriendo la profundidad del silencio Para poder escuchar al Señor, conocer los secretos de Su corazón y aprender a ser dóciles a su Santo Espíritu. Los Siervos del Cordero se han unido Para dar una respuesta al llamado de Dios a servir en la intercesión, ofreciéndose en unión con Cristo Para la Gloria del Padre. "El Hijo del Hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y a dar su vida como rescate por muchos ". (Mc. 10, 45) Los Siervos del Cordero están convencidos de que el Señor quiere que los hombres hagamos la historia con El. El se compromete con nosotros y quiere que nosotros, unidos a El, construyamos una humanidad que sea la familia de los hijos de Dios. Lumen Gentium del Concilio Vaticano II, en el apartado 62 nos expresa que a través del apostolado de intercesión misionera la gente de Dios tiene el privilegio de compartir el ministerio y la misión de Nuestro Señor Jesucristo. Es a la luz de esto como los intercesores Siervos del Cordero sienten el llamado de Dios a compartir esta misión de mediación o intercesión de nuestro Señor Jesucristo. “Amense los unos a los otros como yo los he amado ". (Jn. 15,12) Es en esta unión, en esta fuente de gracia y haciendo uso de toda la riqueza ortodoxa tradiciónal existente, unida a los dones del Espíritu Santo para la intercesión, donde se enriquecen, alimentan y fortalecen para servir en sus grupos de oración, parroquias, comunidades, ministerios y diversos apostolados donde se encuentren injertados en su área local, diócesis o arquidiócesis. Los Siervos del Cordero nacieron como fruto cuando un grupo internaciónal de Intercesores Católicos denominado La Comunión de la Zarza Ardiente vino a orar por México, trayendo este maravilloso regalo de servicio a través de la intercesión en el Espíritu de Jesús y haciéndoles conciencia de algo que ya estaba latente y era parte de sus vidas. Los Siervos del Cordero son un grupo de intercesores en intima comunión para servir al Señor y Su trabajo de intercesión en toda Su Iglesia, desde sus propias áreas locales y bajo sus autoridades eclesiales. Esto significa prácticamente que el compromiso que realizan para servir en la intercesión debe contar con el conocimiento y la bendición de sus autoridades eclesiales, desde el párroco hasta el Obispo, manteniendo una estrecha relación que les permita vivir en comunión de acuerdo a la voluntad de Dios. En su propia vida y en su servicio, los Siervos del Cordero son animados para buscar una guía espiritual dentro de sus asistentes eclesiales locales, o directores espirituales que les sean sugeridos para ayudarlos tanto en su vida personal como en el desempeñito de su apostolado. Los Siervos del Cordero son la rama de México de los Intercesores Católicos Carismáticos Misioneros de la Comunión de la Zarza Ardiente (FBB-SC). Los Siervos del Cordero sirven a la Iglesia Catolica de Mexico y del mundo de habla hispana en un apostolado de intercesión misionera en el Espíritu Santo. Ven y vive la experiencia del Poder de Dios |